martes, 30 de noviembre de 2010

TIRO POLICIAL Vs TIRO DEPORTIVO

En esta ocasión os pongo un enlace a un artículo de un blog que considero de máximo interés por los temas que en él se ha publicado y se publican, pero aún más por la alta cualificación de los autores que lo realizan. Tanto Juan Carlos Jaime como Francisco Herrero han sido y son deportistas de altísimo nivel, pero no menos profesionales de la formación del tiro defensivo y la defensa personal.

He tenido el privilegio de recibir mis primeros adiestramientos con arma corta de mano de Juan Carlos, ya que ha sido mi profesor en la escuela, y quizás le deba a él la afición por las armas, ya que seguro que muchos de vosotros le habéis visto tirar en la infinidad de videos de él que circulan por la red. No voy a detallar el palmarés deportivo de Juan Carlos, porque de todos es sabido su trayectoria tanto en IPSC como en competiciones dentro del ámbito de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, pero si destacar que ha sido subcampeón del mundo de IPSC, campeón de Europa IPSC, 8 veces campeón de España IPSC, 7 años número uno del ranking nacional, 2 veces campeón de España de Tiro Policial, etc etc

También he tenido la posibilidad de acudir a algún curso impartido por él junto con Francisco Herrero, cuya trayectoria y experiencia en el mundo de las armas y la formación es muy extensa, además de haber sido un excelente tirador deportivo, como atestigua su amplio palmarés.

Pues bien, seguro que muchos de vosotros, al realizar una práctica de tiro, habéis oído a algún instructor desfasado el comentario “este viene del tiro deportivo”, o “mira, otro de los recorridos de tiro”, etc etc despreciando a aquellos compañeros que empuñan con los pulgares extendidos, o que tienen especial destreza en el cambio de cargador, o en el manejo del arma en sí. Por ese motivo y aprovechando la publicación del artículo de Juan Carlos Jaime, os pongo el enlace para que lo leais con detenimiento y extraigáis vuestras propias conclusiones, que por supuesto me encantaría que pusierais en comentarios para que todos podamos aprender.

Para terminar me gustaría felicitar públicamente a Juan Carlos por su reciente victoria en el Campeonato de Europa de I.P.S.C en la categoría standard celebrado en Serbia, FELICIDADES CAMPEÓN!!!!!!!!!!


ENLACE: "TIRO POLICIAL" Vs "TIRO DEPORTIVO"



domingo, 21 de noviembre de 2010

EL DESENFUNDE Y LA PRESENTACION DEL ARMA.

Es frecuente ver en las prácticas de tiro, a usuarios que a la hora de realizar un desenfunde pierden demasiado tiempo en buscar la ubicación de su arma, no consiguen extraerla, se traban o tienen problemas similares. Asimismo es común ver a tiradores con fundas de altísima calidad y altísimo precio, pero escaso o nulo entrenamiento. Otras veces confluyen otro tipo de factores que lo que hacen es que el desenfunde no sea correcto, lo que se traduce en un aumento considerable de los tiempos de reacción, factor de especial relevancia en un enfrentamiento armado.


Dichos tiempos de reacción dependerán en gran medida de la propia ubicación de la funda, ya que debido a las necesidades de los distintos servicios que puede prestar un agente, también son distintos los lugares en que se porta el arma, atendiendo en muchas de las ocasiones al principio de ocultación.


Las primeras instrucciones que un agente recibe en cuanto al trabajo con armas de fuego suelen ser con una funda exterior situada en el costado correspondiente a la mano fuerte. En el costado de la mano débil deberemos portar los cargadores de reserva (en el caso de la pistola, no en el del revolver). Una vez asimilado el desenfunde con dicha funda y en esa ubicación, corresponderá al tirador, el adaptarla a sus necesidades personales, contando para ello si fuera necesario con el asesoramiento del instructor o especialista.

La funda exterior deberá estar fija en el cinturón, es decir que los distintos movimientos a los que el agente deba someterse durante su servicio, no le permitan variar su ubicación en el cinto, ya que este extremo dificultaría la extracción.


Una vez tengamos la funda perfectamente colocada, nos encontraremos ante uno de los errores más comunes, consistente en que el tirador inicia el desenfunde realizando el empuñamiento del arma desde abajo hacia arriba, lo que hace que no introduzcamos la mano de forma adecuada en la parte mas alta de la rabera de la pistola, existiendo un hueco entre el aductor y la propia rabera, lo que hará que no controlemos la re-elevación de la pistola en secuencias de tiro rápidas y la pistola cabecee. (Lo que no es defecto de la pistola como muchos creen).


Yo suelo recomendar a mis alumnos, que inicien el empuñamiento con un movimiento desde arriba hacia abajo, de modo que la mano haga tope contra la rabera de la pistola, momento en el cual deberemos cerrarla asiendo la empuñadura con firmeza. Será en ese momento en el cual tendremos que liberar los sistemas de retención activa que la funda pudiera presentar, accionando según el modelo las distintas palancas, o simplemente iniciando la extracción. Ya en este punto tendremos el dedo índice colocado a lo lardo de la funda, para una vez extraída la pistola, mantenerlo extendido a lo largo del armazón.


En el momento en que el arma abandone la bolsa de la funda deberemos iniciar el giro del arma orientándola en la medida de lo posible hacia el blanco/agresor, de modo que en caso de tener que abrir fuego de emergencia, tengamos la pistola orientada de modo que podamos alcanzarlo con nuestros primeros disparos.


Aún efectuando fuego continuaremos el movimiento ascendente de la pistola, dirigiéndola hacia los blancos, topándose a la altura del pecho con la mano débil, que abrigará el empuñamiento, continuándolo hacia el frente, e intentando en la medida de lo posible elevar las miras a la altura de los ojos.
En la práctica real, este extremo no es siempre posible, será entonces cuando debamos disparar a otras alturas, en las distintas técnicas de tiro instintivo.

En mis prácticas de tiro recomiendo a los tiradores algunas técnicas que he podido probar y ver sus buenos resultados. En primer lugar considero de gran importancia que a la vez que llevamos la mano fuerte a la pistola para realizar el desenfunde, la mano débil se dirija al pecho al objeto de cubrir zonas vitales, y si fuera preciso desde esa posición, repeler posibles agresiones. La mano débil baja, en la práctica llega a desestabilizar el cuerpo haciéndolo ponerse de lado, con el peligro que conlleva en caso de ser alcanzado.


Una vez la pistola desenfundada y teniendo el arma presentada, la llevo hasta la altura de mi pectoral del costado fuerte, momento en el cual la lanzo hacia el frente con un empuñamiento a una mano o inicio el empuñamiento a dos manos adoptando una posición isoscélica.

En cuanto a la presentación deberemos tener en cuenta una norma fundamental, cuanto más próximos nos encontremos de un agresor, más próxima deberemos tener el arma de nuestro cuerpo, a medida que el agresor se encuentre lejos, separaremos el arma e intentaremos coger referencia visual con las miras de la pistola o revólver para dirigir los impactos.


Si portamos el arma en una funda oculta, deberemos primero retirar, auxiliados con la mano débil, las prendas que la oculten (retirar chaqueta, levantar jersey, etc etc) y proceder del mismo modo que el descrito anteriormente. Igualmente actuaremos con la funda tobillera, la cual descubriremos tirando de la pernera del pantalón con la mano débil, para proceder a la extracción con la fuerte.

Al igual que he dicho en otros de mis artículos, sea cual sea la funda que portemos, su ubicación, o incluso el arma que llevemos, deberemos entrenar hasta que tengamos lo movimientos interiorizados y nos salgan instintivamente como reacción a una situación de peligro.

(AGRADECIMIENTOS AL INSTRUCTOR MANUEL V.)